II taller

 Reseña Dune.

Dune es un libro de ciencia ficción escrito por Frank Herbert, yo lo termine en una semana ya que aunque tiene unas 700 páginas estas se pasan súper rápido ya que la historia es demasiado entretenida y nada predecible.

Dune nos sienta la historia de Poul Atrides hijo de de del Lord de Atrides, que es llamado por el emperador para vivir y gobernar el insólito planeta de Akarris o mejor conocido como Dune. Un planeta en donde el agua es un gran privilegio y sólo las personas más poderosas posen. 

Poul es el hijo de una bruja también y con su adiestramiento y poderes tendrá que sobrevivir a traiciones y toda clase de aventuras en el desierto planeta. 

A mi este libro me pareció increíble, como esta montado todo el mundo y aunque hay mucha política no se siente ni tediosa ni pesada. Con giros en cada capítulo y secretos revelados, lo hace un libro increíblemente entretenido que nos introduce al mundo espacial.

Yo no puedo esperar para leer el siguiente libro y le pongo de calificación 9/10



Trabajo español

La Narración


Un viaje hacia Napoleón

 

Era el 2021 y los jóvenes Joseph y Michael Karev y Khail Smith habían tenido la gran idea de utilizar el gran secreto de sus padres, Milena Karev y Wilson Smith unos reconocidos científicos, alagados de por sus múltiples inventos. La máquina del tiempo, un secreto que no podía ser revelado a nadie ni a los propios jóvenes hijos de los científicos, pero bueno e lo segundo no les fue muy bien que digamos.

Ellos no eran nada tontos, eran curiosos, inteligentes, ansiosos de saber y activos. Y al Khail enterarse del gran secreto no tardo en contárselo a sus amigos y discutir donde y cuando iban a ir. Y aunque fue una larga discusión por fin tomaron una decisión y ni siquiera ocuparon instrucciones para encender la poderosa máquina.

Y ahí estaban en el magnífico y glorioso palacio de Versalles el 23 de mayo de 1812 dentro de un incómodo armario de limpieza o eso parecía. Al salir del pequeño espacio los amigos solo quedaron encantados con el increíble y majestoso castillo. Con grandes ventanales y pinturas por doquier todas con precios nada accesibles. Estaban ahí para detener a Napoleón en su intento fracasado de conquistar Rusia, y aunque Jo y Michael querían ir a la antigua Roma, gracias a la inimaginable perseverancia e insistencia de Khail estaban ahí intentando salvar la vida de un montón de soldados y civiles.

Se encaminaron en busca de Napoleón y aunque no se sabía a ciencia exacta si se hallaba ahí había rumores de que el emperador, había estado allí plañendo su invasión junto a sus más importantes aliados.

Después de dar vueltas por como diez minutos, encontraron un gran salón con unas grandes puertas entreabiertas del que provenía unos grandes gritos en francés. Nous ne pouvons pas battre ces Russes - se escuchó fuertemente, que los amigos tradujeron fácilmente como no podemos vencer a esos malditos rusos. Se acercaron despacio hacia la puerta para observar mejor de lado, y esconderse detrás de unas cortinas rojas que se encontraban a la par de la entrada, escuchando con atención el plan de los franceses pero que realmente no parecía ser muy concreto.

                Cuando llegaron a las grandes puertas pudieron divisar a unos 20 hombres vestidos con sus icónicos uniformes militares del imperio de Napoleón colores blanco, rojo y azul. Todos alrededor de una gran mesa cuadrada en la que en un extremo estaba un Napoleón que se veía cansado y un poco más gordo que en las pinturas y al otro extremo su primer capitán. Jo a quien le apasionaba la historia logro identificar a Karl Philips el príncipe de Austria de la época y uno de los aliados del imperio napoleónico, el jefe del del Estado Mayor Militar Berthier Louis y a Eugene Jerome unos de sus más importantes generales. Además, en la mesa se podía apreciar un mapa de la Europa del imperio de Napoleón junto con el de Rusia y pequeñas banderas que marcaban distintos puntos alrededor de Rusia y Polonia.

                Su plan era esperar a que en algún punto la reunión acabara y escribir y dejar una carta que luego firmarían con un sello del imperio, en esta carta se expresarían como varios comandantes y aliados del imperio intentando persuadir a Napoleón de que la invasión era una terrible idea y así tal vez evitar la guerra. Pero paso mucho tiempo para que ese montón de soldados salieran de la habitación ya que parecían muy concentrados gritando cosas como “No los podemos traccionar” “Ellos nos traicionaron primero” “¿Como soportaremos el clima?, “Iremos en veranos” y otros muchos detalles del plan que simplemente no se interesaron en comprender del todo.

                Dos horas después de estar escondiéndose los amigos estaban hartos y pensaron en irse, pero de repente entro a la habitación desde otra puerta una joven mucama, muy hermosa de unos 16 años. Que les dijo que si gustaban podían ir a comer, el grupo de hombres pareció más que encantado con la noticia y salió con un intento de clase corriendo de la habitación a ir por su cena.

                Por fin, era lo único que pasaba por la cabeza de Michael que fue el primero en entrar a la habitación y aunque ya la habían visto de reojo era mucho más asombrosa desde cerca. Unas grandes, largas y doradas cortinas cubrían dos de las cuatro paredes. Un enorme cuadro de Napoleón resaltaba en una de las paredes y un amplio ventanal con vistas a los jardines reales espectacular. A Jo casi se le cae la cara con solo ver la espectacular sala.

                Y aunque Khail hubiera deseado quedarse ahí durante mil años y analizar las obras de arte y todos los objetos históricos y extravagantes, él era el más consciente de que tenían que apresurarse y si pensaban ejecutar su plan deberían hacerlo rápido. Así que buscaron lápiz, papel y el sello real y Michael con su mejor letra intento replicar la jerga de la época. Y junto con sus amigos empezaron a dar razones por las cuales la invasión a Rusia sería un completo fracaso. Cosas como el mal clima en exceso desde calor hasta frio, falta de alimentos tanto a los animales como a los soldados, falta de conocimiento de los terrenos y caminos y la perseverancia de los rusos.

                Después de escribir una carta que a simple vista parecía escrita por un señor de 50 años gracias a la rara caligrafía del joven, pero un poco acorde con la situación. La metieron dentro de un elegante sobre y la sellaron con el sello imperial. Y dejaron la en la pequeña esquina de la mesa para que pareciera que fue ignorada durante la gran junta. Una idea brillante para ser sincera, no porque la haya escrito yo.

                Los amigos ya cantaban, cuando escucharon ruido proveniente de la pequeña puerta. ¿Qué no se tardaba más comiendo un gran banquete? Se preguntó Khail. Rápidamente divisaron un juego de sillones crema con unos horribles estampados en la esquina de la salida, con una mesita de madera en el centro. Realmente era un buen escondite, pero no les daría tiempo de llegar así que se metieron directamente a las cortinas y así poder atravesar hasta los sillones y luego de vuelta a casa.

                A las cortinas grito desesperada Jo quien ya tenía todo el plan en su cabeza y compartió a sus amigos con solo pequeños gestos y señales. Los hombres entraron a la sala ya cuando los amigos yacían detrás de las majestuosas cortinas, pero eran conscientes que no los esconderían por mucho.

                Los señores parecían más animados que antes y al parecer notaron la carta con mucha facilidad, la leyeron en voz alta y la firma desde El Decado de Versalles, Polonia. Las voces se alzaron, unos coincidían con las preocupaciones y otros daban opciones y soluciones un poco baratas. Pero en la cara de Napoleón solo se divisaba incertidumbre y ninguna señal de comprender que su plan no tenía buenas bases.

                Mientras que el escándalo se empezaba a engrandar en el salón los viajeros aprovecharon para empezar a trasladarse a los sillones y tal vez luego salir. Todo iba demasiado bien, lograron llegar a los sillones sin ser vistos y entonces decidieron ir directo a la salida y solo ir devuelta casa. A Jo le temblaba todo, parecía que le iba a dar un paro del estrés mientras que Michael lograba parecer calmado y Khail realmente lo estaba tomando en cuenta las circunstancias.

                Al casi llegar a la salida del salón todo pasó muy rápido la misma mucama iba entrando por la puerta mientras ellos salían discretamente, ella grito con lo que parecían todas sus fuerzas, ¡Intruso! Y los amigos hicieron lo que mejor sabían hacer correr, tenían que programar el aparato para poder llegar a 2021 y siendo perseguidos por lo que parecía la guardia imperial. Hasta que encontraron un pequeño armario en una esquina en el que entraron, programaron rápidamente el aparato y con un pequeño estallido desaparecieron.

                Cuando la guardia informó a Napoleón y a su noble capitán, que los intrusos parecían haberse esfumado y que no había rastro de ellos ni en la ciudad ni en todo el palacio. Lo sabía muy bien lo que significaba, una trampa de los rusos para persuadirles de no ir a la guerra, pero no, el no cedería hacia sus viles trucos y esto lo confirmo cuando su capitán dijo claro - Esos malditos rusos nos han querido manipular y engañarnos, debemos proseguir con el plan.

                Napoleón estaba totalmente de acuerdo y se dirigió decididamente hacia la sala de reuniones a plantearse más soluciones a sus problemas y con la mayor de las ganas de que de una vez por todas, esos malditos rusos cayeran. Y fue así como durante junio de ese año Napoleón invade Rusia dando paso a una de las guerras más sangrientas de la historia.

 

«El que quiera hacer historia, primero que aprenda de ella».

                                                                           Napoleón Bonaparte




La Obra Teatral

 

Narrador: Era el 2021 y los jóvenes Joseph y Michael Karev y Khail Smith habían tenido la gran idea de utilizar el gran secreto de sus padres, Milena Karev y Wilson Smith unos reconocidos científicos, alagados de por sus múltiples inventos. La máquina del tiempo, un secreto que no podía ser revelado a nadie ni a los propios jóvenes hijos de los científicos, pero bueno en lo segundo no les fue muy bien que digamos.

Ellos no eran nada tontos, eran curiosos, inteligentes, ansiosos de saber y activos. Y al Khail enterarse del gran secreto no tardo en contárselo a sus amigos y discutir donde y cuando iban a ir. Y aunque fue una larga discusión por fin tomaron una decisión y ni siquiera ocuparon instrucciones para encender la poderosa máquina.

Y ahí estaban en el magnífico y glorioso palacio de Versalles el 23 de mayo de 1812 dentro de un incómodo armario de limpieza o eso parecía. Al salir del pequeño espacio los amigos solo quedaron encantados con el increíble y majestoso castillo. Con grandes ventanales y pinturas por doquier todas con precios nada accesibles. Estaban ahí para detener a Napoleón en su intento fracasado de conquistar Rusia, y aunque Jo y Michael querían ir a la antigua Roma, gracias a la inimaginable perseverancia e insistencia de Khail estaban ahí intentando salvar la vida de un montón de soldados y civiles.

Khail: Vamos tenemos que buscar una sala de conferencias o algo parecido (haciendo señal a sus amigos de ir) (Abre la puerta y la atraviesa después que sus amigos)

Jo: Pero hagan silencio, si no nos van a encontrar (Callando a Michael que había soltado una risita nerviosa)

Narrador: El castillo estaba totalmente desolado lo que era bueno ya que no tenían que andar escondiéndose. Pero ese castillo era gigante y nunca habían estado ahí antes encontrar una sala en especifica seria toda una odisea.

Narrador: Después de dar vueltas por como diez minutos, encontraron un gran salón con unas grandes puertas entreabiertas del que provenía unos grandes gritos en francés.

General Frances: Nous ne pouvons pas battre ces Russes

Michael: Hay que vencer a esos malditos rusos

Jo: Vamos es aquí escondámonos detrás de esas cortinas, así podremos escuchar todo. (camina hacia las cortinas y se envuelve en ellas casi desapareciendo)

Michael y Khail: Ya vamos (al unisonó y caminando a la cortina) (Se asoman al gran salón) Es asombroso.

Jo: Que ven díganme (con tono irritado, pero bajo)

Michael: Se acomoda los lentes) Pudieron divisar a unos 20 hombres vestidos con sus icónicos uniformes militares del imperio de Napoleón colores blanco, rojo y azul. Todos alrededor de una gran mesa cuadrada en la que en un extremo esta un Napoleón que se veía cansado y un poco más gordo que en las pinturas y al otro extremo su primer capitán. (dijo en tono tranquilo y fácil)

 Khail: Logro identificar de los hombres de la mesa a Karl Philips el príncipe de Austria de la época y uno de los aliados del imperio napoleónico, el jefe del del Estado Mayor Militar Berthier Louis y a Eugene Jerome unos de sus más importantes generales. Además, en la mesa se puede ver a detalle un mapa de la Europa del imperio de Napoleón junto con el de Rusia y pequeñas banderas que marcan distintos puntos alrededor de Rusia y Polonia. (orgulloso por su saber)

Jo: Bueno tendremos que esperar a que se vayan para poder entrar y ejecutar el plan. (dijo aburrida)

Michael: Pero primero deberíamos de pensar en un plan no creen. (dijo en tono sarcástico y escondiéndose detrás de la cortina)                              

Khail: Bueno yo tengo un par de ideas. Podemos escribir una carta que parezca haber sido escrita en desde el castillo de Varsovia, Polonia ya que es ahí donde se encentra una de las sedes más importantes del imperio y cruciales para esta guerra y expresar nuestras preocupaciones hacia la invasión con los puntos que ya sabemos que van a jugar en su contra.

Michael: Si es buena idea, pero como haremos para escribirla y que no parezca que fue escrita por cualquiera.  

Jo: Podemos entrar a la habitación, ya que en algún momento se tienen que ir y escribir la carta y ponerle el sello imperial, ya que seguro que tienen uno. Y dejarla ahí y ver si logramos convencer a Napoleón. Pero tendremos que se muy rápidos.

Michael: Son unos genios podemos poner cosas como los climas extremos, la falta de alimento, el poico conocimiento del terreno y muchas otras cosas. (emocionado)

Narrador: Después de un rato se pusieron más cómodos y después de pasadas 2 horas en que los uniformados seguían discutiendo como invadir Rusia ya los tres amigos estaban más que cansados. Los amigos estaban hartos y pensaron en irse, pero de repente entro a la habitación desde otra puerta una joven mucama, muy hermosa de unos 16 años.                                                             

La joven mucama: Mi señor su cena está servida (en francés)

Napoleón: Vamos ocupamos un descanso (salió de primero de sala por una pequeña puerta)

Jo: Oigan vamos es nuestra oportunidad, debemos ser rápidos (se levanta moviendo a sus amigos)

Michael y Khail: (Se levantan animados, aunque medio dormidos)

Narrador: Por fin, era lo único que pasaba por la cabeza de Michael que fue el primero en entrar a la habitación y aunque ya la habían visto de reojo era mucho más asombrosa desde cerca. Unas grandes, largas y doradas cortinas cubrían dos de las cuatro paredes. Un enorme cuadro de Napoleón resaltaba en una de las paredes y un amplio ventanal con vistas a los jardines reales espectacular. A Jo casi se le cae la cara con solo ver la espectacular sala.

Khail: Deseo poder quedarme aquí durante mil años y analizar las obras de arte y todos los objetos históricos y extravagantes.

Jo: Vamos ayúdenme a buscar, lápiz, papel y el sello real.

Khail: Ya voy y Michael tú te encargaras de escribir la carta, tu letra parece de señor de 50 años. (buscando lo que le habían encargado y señalando a su amigo)

Michael: Esta bien y me encargo, pero no sé si podre imitar la jerga (recibiendo el lápiz, el papel y el sello)

Khail: Recuerda agregar lo del alimento y la perseverancia de los rusos. (acomodándose el pelo)

Jo: Y lo del clima sin importar que sea verano será terrible. (ansiosa)

Michael: Mjm

Narrador: Después de escribir una carta que a simple vista parecía escrita por un señor de 50 años gracias a la rara caligrafía del joven, pero un poco acorde con la situación. La metieron dentro de un elegante sobre, la sellaron con el sello imperial y dejaron la en la pequeña esquina de la mesa para que pareciera que fue ignorada durante la gran junta. Una idea brillante para ser sincera, no porque la haya escrito yo.

Michael: Vámonos ya, esta sala me está poniendo nervioso.

Narrador: Los jóvenes ya iban a salir de la habitación cuando escucharon la puerta crujir y voces venir de ella.

Jo: Demonios a las cortinas. (señalando las cortinas y entrando hacia ellas)

Michael y Khail: (la siguieron sin titubear)

Narrador: Ya cuando los hombres entraron al saló ya los impostores se encontraban detrás de las cortinas.

Michael: (señalo un juego de sillones al otro lado de la sala, muy cercano a la salida)

Un General: Señor mire no la habíamos visto (ensañándole la carta a Napoleón)

Napoleón: Ábrela y léela en voz alta

General:

Señor creo que le gustaría leerla usted mismo(nervioso) (Pasándole la carta)

Napoleón: Esta bien (agarrando la carta)

Narrador: Mientras Napoleón leía la carta los jóvenes amigos se escabullían por detrás de las cortinas hacia los sillones con la intención de luego ir hacia la salida, activar la maquina e irse.

General 2: Que dice señor?

Napoleón: Es una carta que solicita que abandonemos la idea de invadir Rusia. (atónito)

General 3: Vio Señor se lo advertí.

General 4: No les haga caso a esos necios. Nosotros podemos lograrlo (golpeando la mesa)

Jo: Ya, vamos están distraídos (haciendo señal para salir por la puerta)

Jo, Michael, Khail: (Se levantaron y salieron por la puerta)

Mucama: ¡Intrusoo! (señalando a los amigos)

Michael: Corran (haciendo la señal hacia afuera de la sala)

Napoleón: Atrápenlos

General 1, 2 y 3: Si señor, llamen a la guardia.

Khail: tenemos que encontrar un armario para poder programar la maquina (corriendo)

Guardia: Deténganse ahí (corriendo tras de ellos)

Jo: Miren ahí (señalando una esquina con un armario)

Michel: Vamos

Michael, Jo, y Khail: (doblan la esquina y entran al armario sin ser vistos)

Guardia: ¿Dónde están? (viendo a todas partes)

Khail: Vamos activa eso ya me quiero ir.

Michael: Tenme paciencia eso no funciona tan fácilmente (batallando con el aparato) Listo (con orgullo)

Michael, Khail y Jo: (desparecen con un destello)

Narrador: Cuando la guardia informó a Napoleón y a su noble capitán, que los intrusos parecían haberse esfumado y que no había rastro de ellos ni en la ciudad ni en todo el palacio. Sabía muy bien lo que significaba, una trampa de los rusos para persuadirles de no ir a la guerra, pero no, el no cedería hacia sus viles trucos.

 Capitán: Esos malditos rusos nos han querido manipular y engañarnos, debemos proseguir con el plan. (casi gritando)

Narrador: Napoleón estaba totalmente de acuerdo y se dirigió decididamente hacia la sala de reuniones a plantearse más soluciones a sus problemas y con la mayor de las ganas de que de una vez por todas, esos malditos rusos cayeran. Y fue así como durante junio de ese año Napoleón invade Rusia dando paso a una de las guerras más sangrientas de la historia.

 

 

 

 

 

Canción

 

Hoy por favor, no me rompas el corazón

El realmente nunca entendió

A vos y tu jueguito del amor

 

Para ya, déjame en paz

El pensó que era de verdad

Tu intención siempre funciono

 

Por favor ya déjalo en paz

 

Enamorada de un monstruo

Realmente enamorada de un monstruo

Una divertida broma crees que es

Pero el realmente enamorado

Esta enamorado de un monstruo

Realmente enamorado de un monstruo

 

Tus hermosos y malditos ojos

Mi condena perpetua y tu rostro

Me dices que sí y después que no

EL realmente no se enteró

 

Tu diversión y entretención

Un pequeño muñequito rojo

Y lo usaste como trapo

 

Por favor, ya déjalo en paz

Enamorada de un monstruo

Realmente enamorada de un monstruo

Una divertida broma, crees que es

Pero el realmente esta enamorado de un monstruo

 Realmente enamorado de un monstruo

Completamente enamorado de un monstruo

Hundido por aquel monstruo

 

Por favor ya déjalo en Paz

 


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